En muchas actividades industriales, los trabajos antes realizados por los humanos han comenzado a ser realizados por robots. Estos se han construido principalmente para encargarse de tareas muy repetitivas que terminaban por hacer que fuera una actividad de riesgo para el trabajador.
Los robots se ubican principalmente en las áreas de fabricación y producción. Y puesto que su uso es cada vez mayor, es necesario contar con una buena estrategia de ciberseguridad en la robótica industrial.
Los robots como nuevos empleados en las fábricas
Los robots se han incorporado a cadenas de montaje o fábricas que precisan de la realización de trabajos más repetitivos. De ahí que la aparición de virus que les puedan afectar preocupa, y mucho, a los dueños de las grandes fábricas de producción. Pero, ¿podrían nuestros robots resistir un ciberataque?
Tras realizar varios estudios, se ha llegado a la conclusión de que se puede piratear de manera sencilla un robot industrial. Por este motivo, se deben explicar todos los protocolos a seguir para poder realizar una contención del mismo y que no se traslade al resto de robots participantes.
Tipos de ciberataques que se pueden prevenir
Cuando se crea un robot por parte de un programador, este controla el mismo mediante comandos ordenados con un dron o similar. Para hacerlo funcionar sólo debe intervenir el controlador, que es capaz de recibir un comando, traducirlo y esperar a que este se ejecute y se interprete.
Los robots industriales tienen un nivel de seguridad muy bueno por lo que si se rompe alguna de las reglas que valida eso, se puede iniciar un ataque desde el mismo. Todo esto se produce por un error de software desactualizado; si las bibliotecas o el sistema operativo no se encuentran en su última versión se debe realizar una actualización.
Vamos a indicar ahora las modificaciones pertinentes que pueden afectar a los ataques de seguridad:
- Modificación de los parámetros del controlador: Se trata de que el robot se mueva de manera inesperada.
- Modificación de los parámetros de calibración: Ocurre lo mismo que con en anterior.
- Manipulación de la lógica de producción: Se trata de tomar fotos de la realidad y modificarlas a nuestro propio antojo.
- Alteración del robot percibida por el usuario: El usuario no percibe los cambios.
- Alteración del estado del robot: Su verdadero estado es manipulado y el operador pierde el control.
Se debe tener en cuenta que hay varios tipos de problemas en función de otros criterios:
- Ransomware: Se trata de confundir al usuario, alterando sus viajes y pidiendo conocer los bloques en referencia a su actualización.
- Sabotaje de la producción: Esto se lleva a cabo cuando se introducen defectos de un ínfimo tamaño que hacen que el producto comience a funcionar mal.
- Daño físico: Se trata de la realización de daño real de las partes e incluso de la posibilidad de lesionar al trabajador.
Con todo esto, vas a poder realizar una clasificación de todos los aspectos que intervienen en el período de revisión del equipo y así valorar en qué nivel nos encontramos en cuanto a ciberseguridad en la robótica industrial. Para más información sobre como mejorar la ciberseguridad de tu empresa no dudes en ponerte en contacto con nuestro equipo.
