Actualmente, son muchísimos los profesionales que optan por trabajar fuera de la oficina. Es uno de los grandes adelantos que han llegado a la sociedad actual gracias al avance y a la implementación de las nuevas tecnologías. Pues bien, es ahí donde entran en juego las infraestructuras cloud y virtualizadas: la red privada y el escritorio virtual.
A continuación señalamos cuáles son las diferencias entre una VPN y un escritorio remoto.
¿Qué diferencia una VPN de un escritorio remoto?
En los siguientes puntos establecemos las principales diferencias que existen entre una red virtual privada y un escritorio remoto.
¿Qué es un escritorio remoto?
Se conoce como conexión de escritorio remoto al hecho de que un usuario acceda a una determinada máquina, como un equipo o servidor Windows, de manera remota. A todos los efectos es lo mismo que si estuviese en la oficina de forma física: debe iniciar sesión con su usuario y contraseña, accediendo a su escritorio y a todos los archivos que tenga almacenados en el equipo.
En caso de que tenga una impresora configurada, también puede imprimir en ella sin ningún tipo de problema.
¿Qué es una red virtual privada (VPN)?
En lo relativo a la red virtual privada o VPN, se define como tal a aquella red que se utiliza para que los usuarios puedan conectarse a la misma de manera segura y acceder a los recursos que se encuentran alojados en otra red.
Así, hacen uso del cifrado para crear una conexión segura mediante Internet, una conexión que generalmente es insegura. De este modo, pueden transferir información o datos muy sensibles de forma muchísimo más segura, minimizando así de forma notable el riesgo de robo de información o de ciberataque.
Diferencias entre ambos sistemas
En relación a las diferencias entre escritorio remoto y red virtual privada tenemos:
En el caso de la VPN, no es necesario que el equipo al que se conectan los usuarios esté encendido y en línea. Es suficiente con que accedan a través de la red virtual privada a la oficina y, una vez establecida la conexión, es como si se encontrasen dentro de la red.
A continuación deben acceder al escritorio remoto, indicar la IP interna del propio equipo al que se quieren conectar; de esta forma, ya tienen todo listo para comenzar a trabajar. Es una forma extraordinaria de maximizar la seguridad ya que de este modo el equipo de la oficina no queda expuesto a Internet, y todos los peligros que ello supone.
Además, todo el tráfico dirigido a esa red privada pasa por un “túnel” a través de Internet, cifrándolo; así, la red privada se encarga de descifrar la información al otro lado. El tráfico es considerablemente más lento que en una red tipo LAN, en la cual no está codificado.
Estas son las principales diferencias entre una VPN y un escritorio remoto, dos grandes avances en la era digital que han permitido cambiar en muchísimos casos el modo de trabajar.
